El lío del INEOS: Egan Bernal jubila a Chris Froome
NOTA POR ELMUNDO.ES
«Nunca volverá a ser el mismo». Joseba Beloki y otros damnificados por crueles caídas aventuraban que las secuelas sufridas por Chris Froome (35 años) en aquel brutal accidente en el Dauphiné de 2019 supondrían un lastre insoportable para el británico. El regreso a la competición del cuádruple ganador del Tour de Francia ha otorgado la razón a esos que mostraron sus sospechas catastrofistas. Las prestaciones del veterano corredor han sido mediocres y ayer Dave Brailsford, máxima autoridad del Ineos, confirmó lo que parecía inevitable. «Chris todavía necesita un poco de tiempo para volver a su mejor nivel», aclaró. Froome ha quedado excluido de la lista del próximo Tour (29 de agosto-20 de septiembre) y su objetivo será la Vuelta a España. «Siento que ahora no puedo aportar lo que se necesita en el equipo para el Tour. La Vuelta es un objetivo más realista», dijo el británico-keniata. También ha sido apartado de la Grande Boucle el galés Geraint Thomas (34 años), que se centrará en el Giro de Italia. El esperado tridente ya es utopía.
El bajo estado de forma de ambos corredores es la explicación oficial para uno de los noticiones del año en el ciclismo. De un plumazo, la escuadra británica ha sepultado cinco victorias en el Tour de Francia. Tras esta decisión se esconde una lucha de poder por la jerarquía del equipo, un rejuvenecimiento del grupo, el temor al empuje de Jumbo y una jubilación anticipada del último icono en las conquistas de las generales de las grandes rondas. Extraño ambiente en la indiscutible formación dominadora de las últimas temporadas y el gran referente en la adaptación de los avances tecnológicos en beneficio de los ciclistas. Ya sorprendió que Froome anunciara la marcha del equipo para comprometerse con el modesto Israel Start-Up Nation. Adiós a toda una vida junto a Brailsford. El aspirante a reunir cinco títulos en el Tour no estaba dispuesto a quedarse a la sombra de Egan Bernal, el joven (23 años) y brillante vencedor de la última edición. El colombiano sentía que se había ganado los galones en la carretera y que su ciclo de gregario había terminado. Ni un paso por detrás de Froome y Thomas.
El Dauphiné de la pasada semana dispersó incertidumbres y puso a cada uno en su sitio. Bernal estuvo con los mejores hasta que se retiró por dolores en la espalda. Froome y Thomas, con un rendimiento anodido, se vieron superados por su sus escuderos, terminaron clasificados 71º y 37º, respectivamente, a más de una hora del triunfador, el colombiano Daniel Martínez. Por el contrario, en este singular inicio de temporada ha destacado la figura de Richard Carapaz, vencedor de una etapa en la Vuelta a Polonia. El ecuatoriano, recién llegado a Ineos, se ha ganado un puesto para el Tour. Lo mismo ha sucedido con el costarricense Andrei Amador. El sector sudamericano crece en el equipo británico, que ahora teme perder notoriedad por la presión del enemigo Jumbo, capitaneado por de Primoz Roglic, Tom Dumoulin y Steven Kruijswijk. Jamás la escuadra de Brailsford (dominadora de todos los Tour de Francia desde 2012), había mostrado tanta debilidad como en esta campaña. En el golpe de timón, han quedado damnificados los viejos Froome y Thomas , que consideran que se merecían mejor trato después de los servicios prestados.